Hechos 18:1-11
“Una noche el Señor le dijo a Pablo en una visión: ‘No tengas miedo; sigue hablando y no te calles, pues estoy contigo. Aunque te ataquen, no voy a dejar que nadie te haga daño, porque tengo mucha gente en esta ciudad’” (vv.9-10 NVI).
Al ver nuestras ciudades podemos sentirnos intimidados por la gente que la habita. Oímos a diario de tanta violencia que no nos es difícil relacionar a ésta con la gente y entrar en una situación de sospecha. En este contexto el sentido de prudencia ha llevado a algunos a tomarse ciertas precauciones para anunciar el mensaje del evangelio. Existen quienes incluso han tomado demasiadas, que ya no abren su boca para hablar ante el temor de que alguien de una manera descortés les diga que no quiere saber nada de Jesucristo.
Al mirar nuestro pasaje nos podemos percatar que Pablo también entró en una situación parecida. Habiendo predicado por unas semanas en Corinto, los judíos empezaron no solo a oponérsele sino también a blasfemar contra el evangelio. Sin duda debió haber temido por su integridad física (ya había pasado por experiencias parecidas) que se aunque seguía en la ciudad se paralizó y dejó de hablar. En esa situación las palabras del Señor fueron su fortaleza para tomar un nuevo ánimo y desarrollar en esta ciudad un ministerio de dieciocho meses.
No sé cuál de las palabras dichas por el Señor te llamen más la atención, personalmente me centro en estas: “tengo mucha gente en esta ciudad”. Creo que con estas palabras se le estaba diciendo que había muchos que eran como él que se hallaban esperando que se les hablara de Jesús para reconocer a Dios como su Padre. “Los míos están aquí” es lo que estas palabras nos implican y con esto en mente, Pablo renovó su entusiasmo por la predicación.
Este es el mismo criterio que nos debe llevar a seguir adelante confesándolo delante de los hombres. Dios tiene a los suyos en nuestras ciudades, son otros como nosotros, por lo tanto debemos de seguir con la tarea de atraerlos al redil del que son parte. No temamos… ellos son suyos.
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