“Pídeme y te daré a conocer secretos sorprendentes que no conoces acerca de lo que está por venir” (Jer.33:3)
Creo que muchos pasamos por la experiencia de Jeremías. Nos atascamos porque no entendemos lo que Dios está haciendo o lo que él hará. “¿Esto viene de ti, Señor?”, “¿Qué harás, Señor?” son preguntas que se agolpan inquietando a nuestro espíritu.
Cuando Jeremías llegó a este punto, el Señor no lo ignoró, no pasó por alto la angustia que embargaba el alma de su profeta. Entonces le dijo: “Pídeme y te daré a conocer secretos sorprendentes que no conoces acerca de lo que está por venir”. ¿Qué hizo Jeremías con tal ofrecimiento? Le creyó a Dios de modo que todo el capítulo treinta y tres es el Señor dándole a conocer las cosas que él no conocía.
Dios tiene el mismo ofrecimiento para nosotros. Este texto no debería estar en las Escrituras si el Señor no tuviera el mismo trato para nosotros. Sin duda él quiere que sepamos que también este beneficio nos corresponde. Así que... ¿Por qué esperar más? Tómalo… ¿Quizás hoy mismo la estés necesitando?
No hay comentarios:
Publicar un comentario